Marcelo en el mundo real es una lectura ágil, amena y sencilla. Conmueve la bondad del protagonista en un mundo en el que la injusticia, las malas intenciones, el egoísmo y los problemas, a veces nimios que nos ahogan, prevalecen.
El mexicano Francisco X. Stork es el autor de esta novela cuyo protagonista tiene síndrome de Asperger. La persona afectada tiene problemas de interacción social y presentan comportamientos, su pensamiento es lógico, concreto e hiperrealista.
Y así es Marcelo, un adolescente con una gran capacidad musical, para quien el mundo no tiene matices, todo es blanco o negro, que utiliza un lenguaje directo y no entiende comportamientos o situaciones ambiguas, sin dobleces. No logra entender gestos o señales fruto de emociones y lo que no puede ver, no lo considera real. Las rutinas, los horarios, la protección de su familia… y la adolescencia, un periodo de por si duro por el que todos pasamos y que él ve incrementado.
El verano en el que Marcelo tiene 17 años, su padre cree que le vendrá muy bien empezar a conocer el mundo “real” y lo lleva trabajar en su bufete de abogados. Todo lo que él había vivido se tambalea y tiene que empezar a descubrir su nueva identidad. Marcelo va a descubrir sentimientos como la envidia y la competitividad que chocan con la concepción de su mundo, aprenderá qué es amor, la ira o a sufrir ante las injusticias. Y ante todo nos mostrará cómo podemos descubrir la imperfección del mundo y aceptarla con una mirada más limpia, con unos sentimientos más verdaderos que en ocasiones se nos olvidan. Podremos perdonar, olvidar, reflexionar y avanzar ante las dificultades para disfrutar de lo bueno que nos proporciona el entorno que tenemos.
“Pese a todo el dolor que he visto en Paterson, no puede compararse con el dolor que la gente se causa mutuamente en el mundo real”
Más información: