Memorias de un amigo imaginario

Memorias de un amigo imaginario es un libro original y tierno de Matthew Dicks, un autor que consigue introducirnos en la piel de un niño con autismo sin nombrarlo en ningún momento. La idea de crear un libro tan sorprendente e inteligente y un protagonista como Max es una idea que ha ido madurando a lo largo de su experiencia como maestro y de trabajar con niños con esta discapacidad. Como él bien dice en una entrevista concedida al blog Libros y Literatura:
    “Se trata de chavales encantadores e interesantes a los que he aprendido a entender en cierto grado. Siempre me he preguntado si los padres y los maestros de estos niños no les estarán haciendo un flaco favor al dar por sentado que serían más felices si fueran capaces de relacionarse con otros niños de una manera más típica. Quizá para estos niños la felicidad se encuentre de una forma mucho más solitaria de lo que podríamos esperar. Quise dar voz a esta idea a través de Max, a la vez que retrataba a un niño que es diferente, pero no es menos capaz de conseguir cosas extraordinarias. No tenemos ni idea de lo que realmente ocurre en la mente de un niño autista”.
En junio de 2012 nace la editorial Nube de tinta, perteneciente al grupo Random House Mondadori. Su finalidad es publicar novelas que emocionen y que gusten a todos los públicos, con personajes que nos hagan pensar y reflexionar, que vivan retos o sean ejemplos de superación y coraje. Este es uno de sus primeros libros editados.
Budo, el amigo imaginario de Max, es el narrador de esta novela. Algo, de principio, totalmente original e inesperado. A través de él conocemos la emotiva relación entre los dos amigos, sus dudas, sus miedos y logramos una empatía total con el protagonista.
Max tiene 8 años y en el colegio no tiene amigos, vive hacia sus adentros y prefiere que nadie le moleste porque no le entienden. Desde los tres años su gran amigo es Budo, el amigo que imaginó como cualquier otro niño de su edad y a quien sólo puede ver y hablar Max. La estrecha relación empieza a ponerse en peligro porque todos quieren que Max sea de otra manera, y esto asusta a Budo que solo quiere ayudarle y que logra transmitirnos sus propios sentimientos de generosidad, simpatía, amistad, cariño…. hacia personas con problemas de comunicación.

Otras reseñas recomendables:

Otras noticias a destacar

Comparte esta entrada:

Share on facebook
Share on twitter
Share on linkedin
Share on pinterest
Share on email
Share on whatsapp
Relacionado:
Claudia Durastanti
novela, relaciones familiares, sordomudez